En las empresas de transporte nacional se suele dejar al conductor la tarea de optimización de rutas, teniendo plena autonomía para decidir por dónde ir, cuánto parar, qué carretera es mejor, etc.
Siempre es bueno que el chófer tenga la última palabra, pero las circunstancias actuales aconsejan la asignación de rutas de transporte, pues lo cierto es que tiene muchas ventajas para la empresa.
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¿Por qué deberías hacer una planificación efectiva de rutas de transporte?
Vivimos en un mundo cada vez más competitivo y el transporte no es una excepción. Hay mucha competencia, los combustibles son muy caros y los conductores tienen tiempos de conducción muy justos.
Por eso, la planificación de rutas de transporte puede significar una ventaja competitiva que será vital a largo plazo en la supervivencia de la compañía.
Ahorro de costes
El principal motivo para la optimización de las rutas es el ahorro de combustible, pues en el transporte se necesitan muchos litros de diésel con el fin de hacer 100 km. Eso significa que una pequeña mejora puede suponer un ahorro de miles de euros a final de año.
Se optimiza el servicio
Si el diésel es caro qué decir de los vehículos. Una buena gestión de rutas consigue usar menos vehículos para realizar los mismos viajes.
No se hace magia, pero eliminando un solo camión los costes se reducen de manera considerable.
Ahorro de tiempo
Los tiempos son fundamentales en el transporte. Los clientes quieren que sus pedidos lleguen cuando se ha pactado y los conductores tienen establecido por ley las horas que pueden conducir.
Cuando se consigue ahorrar tiempo los clientes estarán contentos y los conductores también, pues harán el mismo trabajo cansándose menos.
¿Cómo hacer la optimización de rutas?
Establecer las rutas para transporte de carga lleva un tiempo. Hay que analizar de manera profunda muchas variables y después hacer un estudio que mejore todas las rutas dentro de lo posible
Se necesitan datos
Recopilar datos es imprescindible si queremos hacer que las rutas sean mejores. Hay que conocer los datos de los empleados para saber cuándo están disponibles; también es necesario saber de qué vehículos disponemos y sus dimensiones, además de tener en cuenta las mercancías que se transportan.
Hay que emplear la tecnología
Para relacionar los datos se necesita la tecnología pues sin ella es imposible obtener conclusiones.
Ahora mismo el seguimiento por GPS lo hace todo más sencillo, ya que nos da los datos de los camiones en tiempo real, conociendo las rutas que siguen, cuánto consumen, el tiempo que pasan parados, etc.
Con un software que “mezcle” todas las variables se pueden obtener las mejores rutas para cada viaje, pues no es lo mismo transportar un camión de alimentos que llevar uno con sustancias peligrosas.
Se da a los conductores toda la información
El paso final es llevar todo el trabajo al día a día de la empresa, con la asignación de rutas de transporte a cada conductor.
Así, habrá que dar al chófer unas indicaciones sobre por dónde tiene que ir, dónde puede parar, en qué gasolineras repostar, si debe evitar algunas zonas porque hay mucho tráfico, los aparcamientos en donde es más probable que sufra un robo, etc.
Aquí podemos chocar con los conductores, que pueden ver esto como una intromisión en su trabajo, por lo que habrá que explicarles bien que también les ayuda a ellos, pues uno de los objetivos es que puedan hacer mejor su tarea en menos tiempo.
Además, esta optimización se basa en recomendaciones a seguir, puesto que la persona que es la responsable del transporte de mercancías siempre es la que tiene la última palabra.
Transportar mercancías no es fácil. En el sector hay una competencia feroz, los costes no paran de subir y hay escasez de trabajadores. Por eso, ahora mismo es la mejor época en la que comenzar la optimización de rutas con un Software ERP de transportes, pues puede suponer esa pequeña ventaja necesaria que permita conseguir más clientes.
General Manager en Ipsplus 42